El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha tumbado el modelo 720 de la Agencia Tributaria, que obliga a los contribuyentes a declarar bienes en el extranjero. Además, lo ha hecho mediante declaraciones que critican firmemente la regulación y las medidas aplicadas por hacienda.
La sentencia señala que «La legislación nacional que obliga a los residentes fiscales en España a declarar sus bienes o derechos en el extranjero es contraria al Derecho de la Unión” e identifica tres puntos por lo que esta legislación » va más allá de lo necesario para alcanzar dichos objetivos».
En primer lugar, la imprescriptibilidad. Es decir, su regulación permite a la Administración tributaria proceder sin limitación temporal a la regularización del impuesto adeudado.
En segundo lugar, critica duramente que las multas por incumplimiento en su presentación son desproporcionadas, ya que, en caso de incumplimiento, las multas pueden alcanzar el 150%.
Y, por último, rechaza igualmente, las multas de 5.000 euros por cada dato o conjunto de datos omitidos, incompleto, inexacto o falso, con un mínimo de 10.000 euros, y de 100 euros por cada dato o conjunto de datos declarado fuera de plazo o no declarado por medios electrónicos
En definitiva, el TJUE concluye que la legislación española es «contraria al Derecho de la Unión Europea» y que las medidas que se aplican son «desproporcionadas”.
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